Por Martín Romero
Dos
días después de la liberación total de Manbij, varias organizaciones anunciaron
la constitución del Consejo Militar de al-Bab para liberar la ciudad homónima
de las manos de Daesh. Al-Bab es una importante ciudad en lo que respecta a cantidad
de población. Es el último gran punto de contacto que la organización
terrorista tiene con la frontera turca, y supone el último gran paso para
unificar los cantones de Rojava.
De acuerdo a la conferencia de prensa, el
Consejo Militar de al-Bab fue fundado por siete organizaciones, y no anunció
una fecha del inicio de la ofensiva. Los voceros afirmaron que será “un paso
mas” en la lucha, frase que podría sugerirnos que es en dirección a unificar
los cantones. Llamaron a la Coalición anti-ISIS a prestar apoyo aéreo a la
operación, algo que no está claro si ocurrirá, puesto que los voceros de dicha
coalición afirmaron que se concentrarán en atacar ar-Raqqa.
Al-Bab, como Manbij, está ubicada sobre la
Autovía M4, que une Alepo con Qamishlo, y allí funciona una importante oficina
de inteligencia exterior de la organización terrorista Daesh. Desde la ciudad
también se planifican ataques contra varios frentes. Según los últimos censos,
al-Bab tenía antes de la guerra una población de más de 120 mil habitantes.
Durante el sitio a Manbij, y antes de que se
realice el asalto final sobre la urbe, las SDF (Fuerzas Democráticas de Siria,
por su sigla en inglés), continuaron avanzando por la autovía hasta las afueras
de Arimah, pueblo ubicado casi a mitad de camino con al-Bab, pero detuvieron el
avance para concentrar esfuerzos en la primera.
Son 23 los kilómetros los que deberían avanzar
las SDF por la autovía M4 para llegar a al-Bab, por el este. Y son unos 30
kilómetros en línea recta los que separan la ciudad del cantón de êfrin. De
todas formas, hay dos factores a tener en cuenta: El primero, es que grupos
afiliados a la opositora (al régimen) Coalición Nacional Siria, habían
anunciado hace unos días un Centro de Operaciones para intentar tomar la
ciudad, y el segundo -y quizá mas importante- es que el régimen tiene bajo su
control la base militar de Kowaires a sólo 20 km al sur de al-Bab, y sus tropas
están presentes unos kilómetros todavía mas cerca.
Manbij había resultado un hueso duro de roer
para las SDF, que a pesar de haber preparado la operación durante mucho tiempo
demoraron más de dos meses en poder completarla exitosamente, a diferencia de
otros pueblos que cayeron rápidamente. Esto se debe a que era una ciudad de
casi cien mil habitantes, muchos de los cuales habían sido tomados como rehenes
por los matones de Daesh para ser utilizados como escudos humanos, y a la
decisión de estos de establecer una férrea defensa de uno de los bastiones del
“Califato”.
Estamos en condiciones de afirmar que el
anuncio es un gran desafío político para el gobierno de Turquía, ya que Erdogan
había asegurado que no iba a permitir que se unifiquen los cantones de Rojava.
Y por otro lado, es también un desafío tanto al régimen baazista como a las
organizaciones afiliadas a la CNS opositora, que rechazan cualquier voluntad de
autodeterminación de los pueblos de Rojava y el Norte de Siria.
Al-Bab supondrá un duro esfuerzo a nivel
militar, porque Daesh intentará retener su último gran punto de contacto con el
“mundo exterior”, y a nivel humanitario, teniendo en cuenta que los recaudos
tomados en el asalto a Manbij para evitar víctimas civiles deberán mantenerse,
y por que no redoblarse, dado que es posible que los terroristas tomen
represalias contra la población civil, como ya ha ocurrido.
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